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Foo fighters o cameplas: OVNI’s en el Valle de los Espejos

Actualizado: 29 ene 2021

Rosita C. se desempeñaba como enfermera en el año 94 en la localidad de San Ramón, (Canelones, Uruguay) hoy en día goza de su merecida jubilación y goza de una poderosa intuición, afán de servicio y memoria prodigiosa.


Ella se había comprado una cámara fotográfica de 35mm, de uso familiar. La compra se debía a que, según ella, “sintiendo” hacia donde disparar el obturador, seguramente podría fotografían a los no identificado que estuvieran en dimensiones imposibles de detectar por los sentidos visuales humanos.


Un verano del mencionado año, fueron con su familia a disfrutar de las frescas aguas del arroyo Santa Lucía en San Ramón. Fueron un fin de semana.


Mientras sus hijos jugaban en los arenales, la enfermera “sintió” que debía fotografiar diferentes lugares de la zona donde se encontraban, para ser más preciso, en la zona de los sauzales. Este lugar es un hermoso bosque de sauces que se extienden en la zona este, entrando por la carretera principal rumbo al “Valle de los Espejos”.


En ese lugar la combinación del herbaje, las decenas de sauces, los arenales y el arroyo, recrean un paisaje sumamente armónico y fresco que invita al descanso y a la meditación.


Ella sabía que debía sacarle a un arbusto en especial. Este se hallaba enraizado en la arena del arroyo a pocos metros de donde ella se encontraba. Siguiendo su intuición y sin ver nada a simple vista dispara la cámara con la plena certeza de que “algo” se manifestaría al revelar el royo.


En efecto, la cinta fotosensible proyectó en el papel un objeto esférico de aproximadamente 30 cm de diámetro en tonalidades de color rojo, naranja y amarillo (ver imagen - Rosita C).


¿Cómo podía ser posible que Rosita pudiera intuir a qué lugar disparar su cámara? ¿Se trataría simplemente de un fenómeno telepático? ¿Qué tecnología poseía ese aparato como para mostrarse durante una centésima de segundo, para solamente dejar impresa su imagen en el rollo fotográfico?


Mientras que el amor exalta la vida, la expansión y la flexibilidad, el miedo encumbra la inseguridad, es productor de corazas, quistes, de contracción, exalta el instinto de supervivencia ante el peligro inminente de la muerte. Esta emoción es producida también durante las guerras y sus instancias previas, también en los mataderos de animales para el consumo, la pesca.


Todos los seres vivos con sistema nerviosos central son capaces de producir energías psíquicas de frecuencia vibratoria bajas causada por el miedo ante la muerte, como veremos más adelante, es una cuestión de supervivencia planetaria mantener un estado de paz colectiva desde un estado de paz individual.


En 1941, durante la segunda guerra mundial, comenzaron a reportarse los fenómenos conocidos como "foo fighters". Los primeros pilotos en avistar el portento también lo denominaron como “Kraut fireballs” (bolas de fuego alemanas), pues pensaban que era un tipo de armamento desconocido utilizado por los nazis. En 1943 Gran Bretaña creo una organización para obtener información, acerca de estos misteriosos objetos.

Otro tipo de objetos vistos en la mencionada guerra mundial se parecían a discos de un metro de diámetro aproximadamente y eran totalmente inmunes a las ametralladoras. El 12 de febrero de 1944, Heinrich Himmler, Hermann Goering y Joseph Goebbels fueron testigos del lanzamiento de un cohete experimental nazi. El vuelo fue filmado para poder definir de una forma más efectiva cualquier falla operativa del artefacto. Cuando la película fue proyectada se observa la presencia de un objeto luminoso y esférico que parecía perseguir al cohete. (Ver imagen - obtenida de la red)


Ese mismo año en Polonia, un soldado al servicio de una unidad antiaérea se encontraba en su guardia, cuando observa que el instrumental detecta algo extraño en el cielo. Se trataba de un objeto no identificado que parecía volar a 15000 m de altitud y se acercaba a una formidable velocidad. La tecnología aeronáutica rusa no disponía de los medios como para volar a esa altitud. Los cañones antiaéreos alemanes abrieron fuego cuando el objeto desconocido llegó a los 8000 m.


Detonaron cientos de granadas alrededor del insólito invasor, que luego desarrolló una prodigiosa velocidad promedio de 5000 km/h. De pronto hiso un giro en ángulo recto y se esfumó sin dejar rastro alguno ante la mirada atónita del regimiento.


Estos objetos, como los fotografiados por Rosita, desarrollaban maniobras imposibles para la tecnología aeronáutica de la época, los relatos manifestaban que podían acelerar o desacelerar instantáneamente, o flotar estacionarios. En algunas ocasiones, los pilotos vieron como estos objetos, solitarios o en grupo acompañaban el vuelo de sus aeronaves, y en otras, atravesaban la carlinga metálica del avión y realizaban un paneo del interior, para más tarde irse atravesando el vidrio de las aeronaves.


Los pilotos aliados inicialmente creyeron que podía tratarse de algún arma secreta de los nazis, sin embargo, el alto mando nazi pensaba que era un arma secreta de los aliados. Al culminar la guerra ambos bandos investigaron el fenómeno, siendo abandonadas más tarde debido que las investigaciones arrojaron que estos fenómenos no guardaban una amenaza a su seguridad.


¿Con que tecnología estaban dotadas estas máquinas capaces de atravesar el metal y los vidrios de los aviones en pleno vuelo? Nuevamente se repite una capacidad de maniobra que desafía las leyes de la física clásica. ¿O será que estos objetos “evitan” de alguna manera las leyes Newtonianas?


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